El ex ejecutivo de Odebrecht Claudio Melo Filho afirmó ante la Justicia que el presidente Michel Temer recibió dinero ilegal para financiar su campaña, delito que de comprobarse puede anular su mandato
Melo Filho dijo que en 2014 el mandatario compartió una cena con el titular de la firma, Marcelo Odebrecht, y que pidió apoyo financiero para su partido, según informó el diario Folha de San Pablo.
La reunión, en la que se acordó ese aporte de dinero en billetes no declarados a la Justicia electoral, ocurrió en 2014 en el Palacio Jaburú, residencia oficial del entonces vicepresidente.
La confesión de Melo Filho tuvo lugar ante el juez Herman Benjamin, del Tribunal Superior Electoral, que investiga el presunto financiamiento ilícito de la fórmula presidencial Dilma Rousseff- Michel Temer vencedora en 2014.
La audiencia se desarrolló en medio de severas medidas de seguridad para impedir que se filtren informaciones pues estuvo amparada en el secreto del sumario.
Aun así los medios publicaron este martes informaciones sobre la reunión que se prolongó por cinco horas en Brasilia.
Estas declaraciones de Melo Filho son similares a las que realizara recientemente el extitular de la constructora, Marcelo Odebrecht, ante el mismo Tribunal.
La situación legal de Temer tiende a debilitarse porque el cobro de dinero no declarado está penado con la cesación del mandato y el posterior llamado a elecciones.
Por su parte la expresidenta Rousseff también fue acusada de financiamiento ilegal de su campaña a través de la “Caja Dos” que gestionó uno de los jefes de su equipo electoral, Edinho Silva.
Rousseff puede perder sus derechos políticos por 8 años y quedaría privada de ser candidata a senadora o diputada en los comicios de octubre de 2018.
Además de Melo Filho también prestaron declaración otros dosex jerarcas de Odebrecht, Alexandrinho Alencar e Hilberto Mascarenas.
Los tres se acogieron a la delación premiada para atenuar sus penas a cambio de aportar informaciones sensibles sobre los ilícitos cometidos en la campaña electoral de 2014.
Ante su apremiante situación judicial el presidente Temer y sus abogados analizan una estrategia para no perder el mandato que concluye el 31 de diciembre de 2018.